¼cucharaditade pimienta negra recién molidao más, al gusto
⅓tazade albahaca picada
Para la salsa de tomate
4cucharadasde aceite de oliva
2dientesde ajomachacados
5tomatesgrandes, pelados, sin semillas y troceados
1cucharaditade orégano en polvo
1cucharaditade salo más, al gusto
¼cucharaditade pimienta negra recién molida o más, al gusto
Para la base
2tazasde polenta de cocción rápida
1tazamaíz dulceo 1 lata
⅓tazapasas(opcional)
1cucharaditade sal
1cucharadaazúcar blanco granulada
2cucharadasde aceite de oliva(para engrasar el molde)
Elaboración paso a paso
Paso 1: Hacer el relleno
Calienta el aceite a fuego bajo. Añade la cebolla, cuécela y remuévela hasta que esté transparente. Incorpora las setas y los tomates secos. Cocina a fuego lento tapado hasta que las setas estén tiernas.Sazona con sal y pimienta al gusto. Retira del fuego y añade la albahaca. Reserva
Paso 2: Hacer la salsa
Calienta el aceite de oliva a fuego bajo. Añade el ajo y cuece y remueve hasta que suelte su aroma, sin dejar que se queme. Incorpora los tomates y cuécelos tapados hasta que estén muy blandos. Añade el orégano y sazona con sal y pimienta al gusto.Con un pasapurés, tritura la salsa sobre el fuego hasta que no queden grumos grandes. Reserva
Paso 3: Cuece la polenta
Mezcla la polenta, 1½ taza de agua, el maíz dulce, las pasas, la sal y el azúcar en una olla honda. Cuece a fuego medio, removiendo constantemente.Cuando la polenta esté cocida y empiece a levantarse del fondo, retírala del fuego.
Paso 4: Montar la cazuela
Precalienta el horno a 350ºF [175ºC]. Engrasa la fuente de hornear con aceite de oliva.Vierte la mitad de la mezcla de polenta y extiende en una capa uniforme. Cubre con el relleno y alisa. Extiende el resto de la mezcla de polenta en una capa uniforme y empareja con un tenedor.
Paso 5: Hornear
Cuece en el horno precalentado hasta que la parte superior esté ligeramente dorada (15-20 minutos).
Paso 6: Servir
Sirve junto con la salsa de tomate.
Cook's notes
Si no tienes tomates pelados, basta con hacer un corte superficial en cruz en la parte inferior de los tomates y sumergirlos en abundante agua hirviendo. Retíralos del agua cuando empiece a desprenderse la piel y termina de pelarlos.Si la polenta se te pega a la espátula o al tenedor, cúbrelos con aceite de oliva, la polenta se deslizará enseguida.